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viernes, 25 de septiembre de 2020

Colombia tierra querida… en estado de «retaliación»

 Parte II- Tema psicosocial-violencia.

Por.Carlos Venegas M.ps. 

Continúo con esta nota de; Colombia tierra querida himno de fe y armonía, cantemos, cantemos todos GRITO de paz y alegria vivemos siempre vivemos a nuestra patria querida tu suelo es una oración y es un canto de la vida. Que linda letra de la canción de Lucho Bermúdez. Pienso que al escucharla su letra es una ilusión que nuestros padres y abuelos quisieron vivirla, pero también de nostalgia ya que carece de verdadera realidad.  En el Inconsciente colectivo del colombiano está en su actuar con la intención de "venganza", "revancha", y "desquite", tienen como su significado principal la idea de castigo,  el instinto es actuar con justicia punible, no hay espacio para perdonar o pedir perdón ni menos con el propósito de resarcir daño. Esto es vital para entender por qué “Dios Jehovah” se reserva para Sí mismo el derecho a vengarse. Porque la justicia del hombre es guiada por el pecado-maldad trayendo desgracia  a nuestro  país.

Es que a fines del siglo pasado se está aplicando el código de justicia por su mano, es decir todo el mundo hace lo que mejor le parezca la ley del talión hoy se llama «retaliación» el espíritu de la ley del talión se manifestaba en la blutrache o venganza de sangre. Veamos algunos ejemplos de la retaliación:

Recordemos el atentado a la Escuela de Cadetes de Policía General Santander fue un ataque terrorista perpetrado por el Ejército de Liberación Nacional (ELN), que consistió en la explosión de un carro bomba el 17 de enero de 2019 en las instalaciones de la escuela de formación de oficiales de la Policía en Bogotá. El autor material del hecho fue José Aldemar Rojas Rodríguez, residía en la Vereda Boja de Cubará, norte de Boyacá, una zona limítrofe con Venezuela donde existe amplia presencia del ELN. La detonación de al menos 80 kilos de pentolita cobró la vida de 23 personas —incluido el perpetrador y una cadete ecuatoriana que recibía formación policial allí​ y dejó casi 100 más heridas; la mayoría de ellos, jóvenes cadetes que realizaban su formación como oficiales de policía. También entre los heridos se encuentran 2 cadetes panameños y otra cadete ecuatoriana, quienes recibían formación militar en la escuela policial. La «retaliación» se observa en las protestas callejeras en Bogotá y otras ciudades de Colombia contra la brutalidad policial que causó la muerte la muerte Dilan Cruz el 23 de noviembre 2019 un agente del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) le disparó en la nuca a Dilan Cruz, un estudiante secundario de 18 años, con un cilindro de gas lacrimógeno. Cruz cayó en coma y con su muerte, el 25 de noviembre, se convirtió en el primer mártir del movimiento de vandalismo y terror, fue usada su imagen como un icono para los saqueos y destrucción de varias ciudades. Se olvidó o no se aprendió de la dura experiencia de los años anteriores de esta historia sangrienta que nos carcome, como es el caso de Nicolás Neira, otro joven asesinado por el Esmad en una protesta social. Su papá, Yuri Neira, ha librado una infatigable lucha para que el agente y su superior, que mataron con un proyectil a su hijo de 15 años, le respondan a la justicia. En abril de 2011 Yuri encontró un primer consuelo cuando el Juzgado 37 Administrativo de Bogotá condenó a la Nación —Ministerio de Defensa, Policía y Esmad— a pagar $ 160 millones como indemnización por la muerte de su hijo. Aunque Yuri no aceptó el dinero, sabía que había dado un primer paso para hacerle justicia a la memoria de Nicolás. Sin embargo, el caso tomó un nuevo rumbo cuando el capitán Torrijos, quien había sido ascendido a mayor y dirigía la Dijin en el Caquetá, fue capturado en 2017 por tráfico de drogas, para buscar una reducción en su pena, decidió contar la verdad sobre el otro proceso que ya llevaba en sus espaldas: la muerte de Nicolás Neira. Torrijos señaló al agente Néstor Julio Rodríguez Rúa como el hombre que disparó contra el joven de 15 años. El caso se había estancado hasta que en mayo de este año se anunció que Néstor Julio Rodríguez Rúa había llegado a un preacuerdo con la Fiscalía con el que aceptaba haber disparado contra Nicolás, pero sin intención de matarlo. Ese preacuerdo se habría pactado en secreto, sin que padre del joven muerto fuera informado con anticipación, a pesar de que se habría estado cocinando por más de un año. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia lo tumbó recordando que la Fiscalía no podía acordar una rebaja de pena y un cambio de los cargos que se le imputaron a Rodríguez Rúa porque la víctima era menor de edad. Hoy el juicio en contra de Rodríguez Rúa arrancó nuevamente, pero comenzó desde el inicio, presentando la ruta de investigación y las pruebas que se van a practicar, a pesar de que Nicolás murió hace 15 años. La familia lo único que quiere es justicia, por eso decidió llevar el caso hasta la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, para demostrar que las acciones del Esmad no son aisladas sino sistemáticas como sucedió con Dilan Cruz, que murió después de que un agente del escuadrón le disparara en la cabeza durante las protestas del Paro Nacional, tal como fue asesinado Nicolás Neira. La historia se repite hoy tenemos más de once personas muertas por la protesta social, a raíz de la muerte de Javier Ordóñez, un ciudadano que no supo estar en sana convivencia ciudadana y lamentablemente por sus actos provocó su muerte al enfrentarse con las autoridades, es cierto que no se necesita tener una arma de fuego para agredir a alguien pero con su conducta lo llevó a que lo asesinaran dos patrulleros de la Policía. Su muerte como las otras personas están siendo usadas para desestabilizar este gobierno, trayendo caos en la sociedad por medio de la protesta social, está usándola para ese fin. 
"Es una auténtica masacre de jóvenes tanto de las Fuerza Pública como de los civiles en nuestra ciudad y en el país" 
La muerte de Javier Ordóñez 44 años, hace recordar al grafitero Diego Felipe Becerra, asesinado el 19 de agosto del 2011, y a Dilan Cruz, quien murió el 25 de noviembre del año pasado en medio de una protesta. Los tres perdieron la vida durante procedimientos de miembros de la institución. Estas retaliaciones continúan viéndose en las protestas sociales con 21 uniformados con lesiones de consideración en algunos con arma de fuego, mientras que un vehículo y un bus de TransMilenio fueron incinerados. Desde un Puesto de Mando Unificado liderado por el presidente Duque y el ministro de Defensa, la alcaldesa hizo un llamado a la ciudadanía a “mantener la serenidad y no usar violencia. Igualmente a la Policía a ceñirse al ejercicio legítimo de sus funciones”. El ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, entregó un reporte actualizado con la cifra de las víctimas mortales por los hechos violentos registrados en las últimas horas en el país, en el que indica que la cifra de muertos se elevó a 10. Así mismo, actualizó los datos de los heridos, en los que 93 policías resultaron lesionados, entre ellos un capitán de la institución, quien recibió un disparo con arma de fuego. Además, 53 de los 153 CAI que hay en la capital de la República quedaron destruidos en la jornada de protesta. El CRUE reporta 248 ciudadanos heridos, de los cuales 58 lo fueron por arma de fuego. También 114 policías heridos.

IMPUNIDAD ES EL MANTO DE LIBERTAD Y ORDEN. Es que el problema de fondo no son las protestas es la violencia que está enraizada en el colombiano; que genera intolerancia, crimen al ser gobernados por despotismo del Estado. Veamos que entre enero y agosto del 2019, se produjeron en Colombia 129 homicidios más que en el mismo periodo del 2018, de acuerdo con cifras de Medicina Legal. Este aumento representa una diferencia de 1,72 por ciento. Y, si se compara con la cifra de hace cinco años, en 2019 se han registrado 871 homicidios más que en el 2015, equivalentes a un aumento de 12,94 por ciento. De acuerdo con el más reciente consolidado de la entidad, en lo corrido de este año, hasta agosto, fueron asesinadas 7.602 personas. Si se divide este número entre los 242 días corridos hasta el 30 de agosto, el promedio de homicidios es de 34,41 por ciento cada día. Por otro lado, persiste la ausencia de información sobre los responsables en la gran mayoría de los casos. En 4523 del total de homicidios registrados este año, no se tiene información sobre quién sería el autor material del hecho. Mientras que en 2.147 casos se presume un agresor desconocido. Solo en 218 casos se presume que el homicida es una persona conocida, y en otros 150 se presume responsabilidad de fuerzas armadas o de Policía. Es que el ADN de esta sociedad es la violencia que fue motivada por la codicia del poder tanto político como de enriquecerse, algunos se escudan por las políticas económicas, sociales y ambientales del gobierno, esgrimen que se debe a los narcos pero la verdad es otra porque la historia de esta nación ha venido actuando de la misma manera desde su creación como república, corrupción disfrazada de libertad y orden. 

El ciudadano del común o parroquiano es muy emocional, vivir el ya del dolor o alegría al extremo, parranda o violencia no hay términos medios.  Como terapia  prefiere hacerse el olvidadizo o ser permisivo ante tantos sucesos que han marcado de generación en generación, por interés personales que priman sobre el bien común de una sociedad ha ido creciendo la corrupción en todos los niveles sociales, miremos muy rápidamente la raíces de la sociedad dirigente  de este país, desde los inicios como república esgrimiendo libertad y orden por sus famosos “padres de la patria” que más que padres eran unos gamonales que en su mayoría no habían heredado las tierras. Sino en muchos de los casos valiéndose de artimañas y en otras de la violencia, se apropian de las tierras de las comunidades campesinas o de los aborígenes. Donde se mezclaba una variedad de etnias como  fueron blancos, mestizos e inclusive indios con preeminencia de caciques (estos últimos fueron después sometidos por el poder y astucia de los poderos e intelectuales del momento) con un fin común de enriquecerse a costillas de los más desprotegidos y desamparados de estas comunidades. Fueron considerados señores (alta sociedad) y que aparentemente se habló en tener libertad y orden, la realidad es otra y será así mientras el común de esta sociedad colombiana siga dividida para enriquecerse, buscando poder en los cargos  estatales, engañan, solo era y es una falacia libertad y orden.  La historia nos muestra al fin las huellas del pasado y que dependen del peso pueden ser  imborrables. Los gamonales hicieron alianzas con otros gamonales y con familias de la élite santafereña para lograr el control local. Hubo pequeños conflictos y batallas locales por lograr el poder. ¿CUÁL ES SU PROPÓSITO? Los hacendados o gamonales buscaron expandir sus propiedades con la finalidad de incorporar tierras, rebaños y hombres, siempre a costa de las comunidades. ¿QUE SIGNIFICA LA PALABRA GAMONALISMO? • Deborah poole sostiene que el término deriva del nombre de Una planta perenne, virtualmente indestructible, de la familia de las liliáceas, el GAMÓN, [que] crece inclusive en los terrenos más duros y a veces es clasificada como una planta parásita, cuyo crecimiento y propagación se da en detrimento de sus vecinas menos agresivas.

Dios Jehová dice en su palabra; Escuchen ahora, gobernantes y autoridades, ¿acaso no corresponde a ustedes saber lo que es la justicia? 2 En cambio, odian el bien y aman el mal; despellejan al pueblo y le dejan los huesos pelados. 4 Un día llamarán ustedes al Señor, pero él no les contestará. En aquel tiempo se esconderá de ustedes por las maldades que han cometido…..Por mí gobiernan los príncipes y los nobles, todos los que juzgan con justicia.…

Continuará tercera parte, si es de su interés y valía favor divulgar esta nota.

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